miércoles, 18 de febrero de 2009

El martirio de Santa Yolanda

Hace dos años esta noticia publicada en La Rioja, prueba de amor, embelesada por la proximidad a San Valentín con ese empeño periodístico de enlazar chorradas, describía un estado de amor puro y público que rozaba el ridículo y desde luego producía gran vergüenza ajena, tanto el hecho como la noticia. Pasados dos años, la gran venganza, de la misma autora, pone a caldo al que antes trataba como ejemplo cupidil.
Pues bien, ahora mismo, y con el agravante de hacerlo por San Valentín, están torturando pura y públicamente a las yolandas, haciéndole todo tipo de perrerías; estiramientos de los cables libres de halogenuros, retorcimientos incruentos de las lámparas, punzadas penetrantes en la óptica, quemaduras con mayor número de vatios hasta conseguir diámetros y conos de apertura óptimos, haces deslumbrantes luminosos en los ojos y un sinfín de horrores más hasta que confiesen su culpabilidad.
Hemos pasado del sonrojo que provocaba aquel engolamiento al sonrojo que provoca el escarnio público. Tan sólo en dos años.
Y la pasta que nos está costando.
Lo vengo diciendo hace tiempo, las yolandas podían utilizarse, además de bien-mal-iluminar, para colgar de las patas y boca abajo a todos éstos. Igual hacían falta más yolandas.

3 comentarios:

juan diez del corral dijo...

Teri no es una autora sino un abreviado de EleuTERIo.
Mándame la foto de abajo para ponerla como CASCOTE a un tamaño que se pueda ampliar y ver en detalle.

justo rodríguez dijo...

Y la foto, a quién se la has birlao?

juan diez del corral dijo...

En internet no se birla nada, todo se toma prestado