miércoles, 3 de febrero de 2010

Santo Jol

Primero fue en San José de Cala-Sanz cuando dije aquello de "en un periodicucho de mala fama (tan mala, que se vieron obligados a cerrarlo)" y después en Santa Carlota lo repetí y dije que otro día hablaría de Santo Jol, en referencia a la gaceta periódica del COAR denominada elhAll, en una época en la que la actividad colegial era fluida, las relaciones cordiales y como se dice en términos televisivos, con un elevado "share" de participación colegial. Recuerdo incluso inauguraciones con cuartetos de cuerda mientras le atizabamos al jamón y a la conversación. Fue una época que se oían risas en la sede colegial.

El caso es que en aquellos posts dije que hablaría del Santo Jol y lo tengo "borreado" desde entonces, pero con otros matices de los que ahora por fin han conseguido que edite aquel borrador y lo publique.

Por causas atribuidas a correos, recogí en el colegio de manos de Elena en una visita a la biblioteca, bastante más tarde que el resto de compañeros, la nueva publicación denominada El Hall (que no elhAll).


La primera sorpresa fue la formal, se había abandonado elhAll "colorín" para volver (aparentemente) al formato inicial de la publicación. Bien, te preguntas, a ver quién se ha embarcado en esta nueva aventura y a ver cómo la venden editorialmente.

Llegué al estudio y saqué mi colección que se ve en la siguiente imagen.


Supongo que es una cuestión personal, pero cuando he estado implicado en cualquier cosa, le acabo cogiendo cariño. En este caso hasta me dediqué a encuadernarlas por épocas (incluso la "colorín") y pueden dar fé mis colaboradores que es muy interesante releer todas aquellas columnas que ayudaron a sujetar aquella casa de todos durante años, siendo además un boletín demandado y envidiado desde otros colegios nacionales, desde el Consejo, además de por los propios colegiados riojanos. Éste, servía entre otras cosas, para conversar en la calle con los compañeros sobre los distintos temas tratados, comentar los viajes, interesarse por el próximo, etc.

Y digo que le tengo cariño porque fui un invitado especial al parto del boletín cuando siendo miembro de la junta con Marino, me puso de coordinador de la comisión de cultura. En ella asisitimos a la iniciativa de un compañero de editar una "hoja parroquial" para acercarnos como una verdadera "hermandad". Y allá por enero de 1995, (hostia! 15 años ya) tuve la maqueta de la primera propuesta que conservo y encabeza la encuadernación, que es ésta



Observé después que no había director del nuevo y que la editorial estaba firmada por un tal patronato de la FCAR, siglas que si las metes en google imágenes te aparecen varias FCAR con logos más cálidos y divertidos que el nuestro.






Busqué de nuevo con google quién es el tal patronato, y no es otro que la Junta del COAR.

Leí la editorial fuenteovejunesca. Ya me imaginaba que no iba a encontrar ni un solo elogio hacia el promotor de la idea y durante muchos años director, fundamental redactor, comentarista, organizador, maquetador, supervisor de la imprenta de elhAll. Aparte de su labor en la comisión de cultura, viajes, punto de encuentro, etc. Pero lo que no pensaba es que el patronato en realidad es un "pater-nato", con ese tufillo paternalista tan rancio, cuando escriben el último párrafo. A este respecto ya ha dicho bastante Juan en su cascote 130.

Dice Eduardo Mendoza en la introducción de su último libro, Tres vidas de santos, que hay tres categorías de santos, "...los expulsados del santoral, que la Iglesia no reconoce e incluso condena". Añade, "son santos en la medida que consagran su vida a una lucha agónica entre lo humano y lo divino. Dicho de otro modo: su vida trasciende lo humano en la medida en que poseen una visión global de la existencia que los demás disolvemos en el prosaico desglose de los días. La devoción con que se entregan a esta desviación de un modo excluyente y su disposición a renunciar a todo es lo que los asemeja a los santos. Como su lucha es interior y a nadie le interesa su apecto, casi no tienen representación gráfica."

Quizás, Juan, pertenezcas a esta tercera categoría o te quieran colocar en ella, pero en mi Santblogral tienes una hornacina preferente y en cuanto a la representación gráfica creo que con elhAll que creaste y dirigiste, entre otras literaturas y pensamientos, ya tienes suficiente iconografía.

Os dejo con aquella editorial del 95, para poder compararla con la del 10.


Y que la verdad sea dicha. Y ya saldrá el Jol. Estoy convencido.

1 comentario:

juan diez del corral dijo...

Joder, ¡qué bien escribía hace quince años! ¿Quién coño sería el santo que me inspiraba?. Mano de santo tenía por entonces y no como la de ahora, de barrendero, ja ja ja ja.
Bueno no te pases y me metas en una hornacina que, con el encuadre, los zapatazos se dirigen mejor, y me va a ser más difícil a mí esquivarlos.
Un abrazo.