Este niño, que es un santo, tras conocer a los Reyes Majos en Santa Lucía (¡menudo santoral!), se acercó a San Jazz Arra (ya les he dado la idea para aumentar el ciclo de música antigua) a conocer de cerca el nuevo y último conjunto escultórico del artista.
Y el santo sobó con especial mimo todas y cada una de las figuras allí presentes, con la fe del que está recibiendo el alimento para el espíritu y siguiendo las enseñanzas de Felo, hay que tocar y acariciar las obras una y otra vez.
El cuerpo nos lo alimentó la organización con unas exquisitas chuletillas al sarmiento a la luz de una luna llena gozosa de tanta santidad.
El cuerpo nos lo alimentó la organización con unas exquisitas chuletillas al sarmiento a la luz de una luna llena gozosa de tanta santidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario